La cantidad de tiempo que un pollito necesita quedarse con su madre varía según la especie. Por ejemplo, algunas especies precociales, como pollos y patos, pueden abandonar el nido y seguir a su madre poco después de la eclosión. En contraste, las especies altriciales, como los pájaros cantores y los loros, nacen en un estado indefenso y requieren una amplia atención de sus padres durante varias semanas o meses antes de que puedan volar y abandonar el nido.