Los conejos domésticos son animales domesticados y no están adaptados para sobrevivir en la naturaleza. Carecen de los comportamientos instintivos, las habilidades de supervivencia y las adaptaciones físicas necesarias para la supervivencia en el desierto. Los conejos domésticos dependen de los humanos para alimentos, agua, refugio y protección.
Si un conejo de la casa se libera o se abandona al aire libre, es probable que enfrente una variedad de desafíos, que incluyen:
- Depredación: Los conejos de la casa son animales de presa y pueden ser matados fácilmente por depredadores, como coyotes, zorros, halcones y búhos.
- Falta de alimentos y agua: Los conejos de la casa están acostumbrados a recibir una dieta de gránulos, heno y verduras. Es posible que no sepan cómo encontrar alimentos por su cuenta y pueden no tener acceso a agua limpia.
- Exposición a los elementos: Los conejos de la casa no están acostumbrados a vivir al aire libre y pueden sucumbir fácilmente al golpe de calor, la congelación o la hipotermia.
- Enfermedad y lesión: Los conejos domésticos no son inmunes a enfermedades o lesiones que pueden ocurrir al aire libre. Pueden estar expuestos a parásitos, pulgas, garrapatas y otras plagas. También pueden resultar heridos si caen o si son atacados por otros animales.
En conclusión, los conejos de la casa no son adecuados para la supervivencia en la naturaleza y nunca deben ser liberados o abandonados al aire libre. Si ya no puede cuidar su conejo de la casa, hay muchos refugios de animales y organizaciones de rescate que pueden ayudar a encontrarles un nuevo hogar.