El brazo humano y el ala de un pájaro son ejemplos de estructuras homólogas. Tienen una estructura básica similar, pero evolucionaron para diferentes propósitos y realizan diferentes funciones.
El brazo humano tiene un hombro, un codo y una muñeca, y se usa para una amplia gama de actividades, que incluyen agarrar, alcanzar y lanzar. El ala del pájaro tiene un hombro, un codo y una muñeca, pero está especializado para el vuelo. Los huesos del ala son huecos y livianos, y el ala está cubierta de plumas. El ala también tiene una serie de músculos que permiten al pájaro controlar su vuelo.
Las similitudes y diferencias entre el brazo humano y el ala del pájaro son el resultado de la evolución. Ambas estructuras evolucionaron a partir de un antepasado común, pero han desarrollado diferentes adaptaciones en respuesta a diferentes presiones ambientales.