¿Mi perro de repente no puede dejar de estornudar?

Hay varias razones por las que tu perro puede empezar de repente a estornudar de forma incontrolable. Algunas de las causas más comunes incluyen:

1. Alergias: Al igual que los humanos, los perros pueden tener alergias a diversas sustancias del medio ambiente, como el polen, el polvo, las esporas de moho y ciertos alimentos. Cuando un perro inhala un alérgeno, desencadena una respuesta inmune que provoca estornudos, picazón en los ojos y secreción nasal.

2. Infección respiratoria: Una infección respiratoria, como una infección viral o bacteriana, también puede provocar estornudos excesivos en los perros. Otros signos de una infección respiratoria incluyen tos, secreción nasal y dificultad para respirar.

3. Objeto extraño: Si un objeto extraño, como un trozo de hierba, un trozo de comida o un juguete pequeño, se aloja en la nariz de su perro, puede provocar irritación y estornudos.

4. Enfermedad dental: Las enfermedades dentales, como la gingivitis o la enfermedad periodontal, pueden causar inflamación e irritación en las fosas nasales, provocando estornudos.

5. Ácaros nasales: Los ácaros nasales son pequeños parásitos que viven en las fosas nasales de los perros y pueden provocar irritación y estornudos.

Si tu perro de repente empieza a estornudar de forma incontrolable, es fundamental observar su comportamiento e identificar cualquier otro síntoma. Si el estornudo va acompañado de otros signos, como secreción nasal, tos o dificultad para respirar, debes llevar a tu perro al veterinario lo antes posible.

Aquí hay algunos pasos que puede seguir para ayudar a su perro a sentirse más cómodo:

1. Elimine los alérgenos potenciales: Si cree que los estornudos de su perro pueden ser causados ​​por alergias, intente eliminar el alérgeno de su casa. Esto puede significar mantener las ventanas cerradas durante las temporadas altas de polen, usar un purificador de aire y evitar ciertos alimentos.

2. Enjuague las fosas nasales: Puede utilizar un enjuague nasal con solución salina para ayudar a eliminar cualquier objeto extraño o irritante de la nariz de su perro.

3. Proporcione muchos líquidos: Asegúrese de que su perro tenga suficiente agua fresca disponible para ayudar a mantener húmedos los conductos nasales.

4. Utilice un humidificador: Un humidificador puede ayudar a agregar humedad al aire, lo que puede reducir la irritación nasal.

Recuerde, los estornudos excesivos a veces pueden ser un signo de una condición médica grave, por lo que si los estornudos de su perro no mejoran en unos días o van acompañados de otros síntomas, es fundamental consultar a un veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuados.