¿Por qué un perro comenzaría a cojear en cuestión de minutos?

Un perro cojeando de repente en cuestión de minutos puede ser un signo de varios problemas potenciales. Estos son algunos de los culpables más comunes:

1. Trauma/lesión:

* esguince/tensión: Esta es la razón más común para cojear repentino. Se produce un esguince cuando los ligamentos (tejidos que conectan los huesos) se estiran o rompen, mientras que una tensión afecta los músculos o tendones.

* fractura: Un hueso roto, incluso uno pequeño, puede causar dolor severo y cojera.

* dislocación: Una articulación puede aparecer fuera de lugar, causando dolor repentino e incapacidad para soportar peso.

* lesión de la almohadilla de uñas/patas: Una almohadilla de clavos roto o una almohadilla cortada puede ser dolorosa y conducir a cojear.

* Objeto extranjero: Una espina, pieza de vidrio u otro objeto alojado en la pata puede causar dolor repentino y cojear.

2. Condiciones médicas:

* Artritis: Si bien generalmente se asocia con perros mayores, algunas razas están predispuestas a la artritis de inicio temprano. Un brote repentino puede causar dolor y cojear.

* Infecciones: Una infección en las articulaciones, huesos o tejidos blandos puede causar dolor e inflamación, lo que lleva a cojear.

* tumores: Un tumor en el hueso o los tejidos blandos puede causar dolor y cojera.

* coágulos de sangre: Un coágulo de sangre en la pierna puede causar dolor repentino y cojera.

* Problemas neurológicos: En casos raros, los problemas neurológicos como el daño nervioso o la compresión de la médula espinal pueden causar debilidad o parálisis en una extremidad, lo que conduce a cojear.

Es importante buscar atención veterinaria inmediata si su perro comienza a cojear repentinamente:

* No intentes diagnosticar el problema tú mismo.

* Su veterinario necesitará examinar a su perro para determinar la causa de la cojera.

* Pueden ordenar rayos X, análisis de sangre u otras pruebas de diagnóstico.

* El tratamiento dependerá de la causa subyacente.

cosas a considerar mientras espera al veterinario:

* REST: Mantenga a su perro tranquilo y evite la actividad extenuante.

* Compresión en frío: Aplique una compresa fría (como una bolsa de guisantes congelados envueltos en una toalla) al área afectada durante 15-20 minutos a la vez, varias veces al día.

* Medicamentos para el dolor: No administre ningún medicamento para el dolor sin consultar a su veterinario.

recuerda: Siempre es mejor estar seguro que curar. Si su perro comienza a cojear repentinamente, es mejor errar al lado de la precaución y buscar atención veterinaria lo antes posible.