# >> Mascota información > >> Hurones >> En relación con hurones
Los leopardos de las nieves son maestros del sigilo y tienen varios mecanismos de defensa:
camuflaje: Su grueso pelaje manchado combina a la perfección con el terreno rocoso de su hábitat a gran altitud, lo que los hace increíblemente difíciles de detectar.
Agilidad y velocidad: Son escaladores poderosos y ágiles, capaces de navegar por terreno traicionero con facilidad. También pueden correr sorprendentemente rápido en ráfagas cortas, lo que les permite escapar de posibles amenazas.
Garras y dientes: Sus poderosas garras y dientes afilados son armas formidables, utilizadas tanto para la caza como para la defensa.
Vocalizaciones: Utilizan una variedad de gruñidos, silbidos y gritan para intimidar posibles amenazas.
Postura defensiva: Cuando están amenazados, se mantendrán altos, arquearán la espalda y hincharán su pelaje para parecer más grande y más intimidante.
Retiro: Si todo lo demás falla, se retirarán a áreas más altas e inaccesibles, lo que dificulta que los depredadores los sigan.
Marcado de aroma: Marcan su territorio con orina y heces, señalando a otros leopardos de nieve y posibles amenazas para mantenerse alejado.
Adaptabilidad: Son animales altamente adaptables, capaces de sobrevivir en entornos duros y de gran altitud donde pocos otros depredadores pueden prosperar. Esto les da una clara ventaja en su ecosistema.
Es importante tener en cuenta que los leopardos de las nieves son típicamente solitarios y evitar la confrontación directa a menos que sea absolutamente necesario. Confían en gran medida de su camuflaje y agilidad para evitar depredadores, convirtiéndolos en maestros de tácticas evasivas.