# >> Mascota información > >> Gatos >> En relación con los gatos
1. Comunicación
Cuando una gata está en celo, se queja para comunicar su receptividad a los machos. El gemido es una forma de atraer parejas potenciales y hacerles saber que está lista para aparearse.
2. Estrés y malestar
Estar en celo puede ser una experiencia estresante e incómoda para los gatos. Los cambios hormonales que se producen durante el celo pueden provocar molestias físicas, como contracciones uterinas, que pueden provocar lloriqueos. Además, la atención constante de los gatos machos y la interrupción de su rutina diaria pueden aumentar el estrés y la incomodidad, provocando que los gatos se quejen.
3. Buscando atención
Los lloriqueos también pueden ser una forma para que los gatos busquen la atención de sus dueños. Cuando una gata está en celo puede ser más cariñosa y exigente, y lloriquear puede ser una forma de conseguir la atención y el cuidado que necesita durante este tiempo.
4. Comportamiento Territorial
Durante el celo, las gatas pueden exhibir un comportamiento territorial y vocalizar para marcar su territorio y disuadir a otras hembras de acercarse. Los lloriqueos pueden ser parte de este comportamiento territorial, ya que ayuda a comunicar a otros gatos que el área es suya.
Es importante tener en cuenta que los lloriqueos excesivos durante el celo a veces pueden indicar afecciones o complicaciones médicas subyacentes, como infecciones uterinas o complicaciones durante el proceso del parto. Si tu gato lloriquea excesivamente o muestra signos de angustia, se recomienda consultar a un veterinario para su evaluación y tratamiento adecuado.