¿Qué comen las palomas en la ciudad?

En entornos urbanos, las palomas se alimentan principalmente de una dieta de fuentes de alimentos asociadas a los humanos. Con frecuencia consumen restos, sobras y granos que se encuentran en el suelo, como palomitas de maíz derramadas, migas de pan y alpecos desechados. También se sabe que las palomas atacan botes de basura y contenedores de alimentos en busca de sustento. Su comportamiento oportunista les permite prosperar en ciudades donde el acceso a fuentes de alimentos naturales puede ser limitado.

Además de los restos y las semillas de aves caídas, las palomas también se alimentarán de semillas y frutas de árboles, arbustos y otra vegetación urbana. También pueden frecuentar los comederos de aves y las áreas de picnic donde los humanos dejan las sobras comestibles. Su dieta variada también incluye insectos, arañas y otros pequeños invertebrados que pueden encontrar en parques y jardines.

Una preocupación relacionada con la alimentación de palomas en las ciudades es la propagación de enfermedades. Las palomas pueden transportar varios patógenos y parásitos que pueden ser perjudiciales para los humanos y otros vida silvestre. Por lo tanto, no es aconsejable alimentar a palomas y, en cambio, alentarlas a buscar naturalmente en entornos urbanos.