La caza furtiva es una técnica de cocina que consiste en hervir suavemente los alimentos en un líquido sabroso. La caza furtiva se utiliza a menudo para alimentos delicados como pescado, mariscos, huevos y verduras.
Algunos ejemplos específicos de alimentos adecuados para la caza furtiva incluyen:
- Filetes de pescado, como salmón, bacalao o tilapia.
- Mariscos, como camarones, vieiras o mejillones.
- Huevos, como huevos escalfados o claras de huevo
- Verduras, como espárragos, brócoli o zanahorias.
A la hora de escalfar alimentos, es importante utilizar un líquido que sea sabroso y complementario al alimento. Por ejemplo, el pescado se puede escalfar en un chorro de agua con hierbas, vino blanco o zumo de limón. Las verduras se pueden pochar en un chorro de agua con sal, pimienta o mantequilla.
La caza furtiva es una técnica de cocina saludable que preserva los nutrientes de los alimentos. También es una técnica versátil que se puede utilizar para preparar una variedad de platos.