Los elefantes se refrescan agitando las orejas.
Los elefantes tienen orejas grandes y delgadas que están cubiertas por una red de vasos sanguíneos. Cuando el elefante bate las orejas, los vasos sanguíneos se dilatan y permiten que fluya más sangre a través de ellos. Esto ayuda a disipar el calor del cuerpo y enfriar al elefante.