Los conejos son animales altamente adaptables que pueden vivir en una variedad de hábitats. En los zoológicos, los conejos reciben recintos que satisfacen sus necesidades específicas. Estos recintos generalmente incluyen:
* Un área protegida: Los conejos necesitan un lugar para esconderse y sentirse seguro. Este puede ser un refugio cubierto, una madriguera o un tronco hueco.
* Alimentos y agua: Los conejos necesitan un suministro constante de alimentos y agua. En los zoológicos, generalmente se les alimenta una dieta de heno, gránulos y verduras frescas.
* juguetes y enriquecimiento: Los conejos son animales curiosos y necesitan oportunidades para jugar y explorar. Los zoológicos les proporcionan una variedad de juguetes y artículos de enriquecimiento, como juguetes de masticación, bolas y rompecabezas.
* Temperatura y humedad adecuadas: Los conejos son sensibles a la temperatura y la humedad. Los zoológicos mantienen sus recintos a un nivel cómodo de temperatura y humedad.
Los conejos son animales sociales y lo hacen mejor cuando se mantienen en parejas o grupos. En los zoológicos, generalmente se encuentran con otros conejos que son compatibles con su personalidad y temperamento.
Los conejos son capaces de adaptarse a la vida en un entorno del zoológico y pueden prosperar cuando se les proporciona el cuidado y la atención adecuados.