No, los delfines no se quedan en aguas árticas durante todo un año.
He aquí por qué:
* Tolerancia en frío: Si bien los delfines son mamíferos altamente adaptables, no están construidos para el frío extremo del Ártico. Carecen de las gruesas capas de grasa y adaptaciones especializadas que se encuentran en animales árticos como focas o osos polares.
* Disponibilidad de alimentos: Los delfines se alimentan principalmente de peces y calamares, que son menos abundantes en las frígidas aguas árticas.
* Migración estacional: Se sabe que muchas especies de delfines migran a aguas más cálidas durante los meses más fríos para encontrar alimentos y condiciones de reproducción favorables.
Hay algunas excepciones:
* ballenas beluga: Las ballenas beluga a menudo se denominan "canarias del mar" porque se encuentran en las regiones del Ártico y la subártica. Están bien adaptados al agua fría con una gruesa capa de gruesa y un sistema respiratorio especializado. Sin embargo, no se consideran delfines, sino más bien un tipo de ballena dentada.
Si bien puede haber casos ocasionales de delfines que se aventuran en aguas más frías, generalmente evitan el Ártico durante períodos prolongados.