1. Pérdida y fragmentación del hábitat: La deforestación, la urbanización y el desarrollo de la tierra pueden conducir a una pérdida de hábitats ardientes, fragmentando poblaciones y reduciendo su capacidad para moverse libremente y encontrar alimentos.
2. Cambio climático: Los cambios en los patrones de temperatura, precipitación y nevadas debido al cambio climático pueden afectar la capacidad de ardilla de ardilla de sobrevivir, especialmente durante los períodos de eventos climáticos extremos.
3. Enfermedad: Las enfermedades infecciosas, como la tularemia, pueden propagarse rápidamente a través de poblaciones ardillas y causar disminuciones significativas.
4. Depredación: Un aumento en la población de depredadores, como coyotes, zorros y halcones, puede conducir a tasas de depredación más altas en las ardillas.
5. Competencia con especies introducidas: Las especies no nativas, como las ardillas grises, pueden superar las ardillas de ardillas para alimentos y recursos, lo que lleva a una disminución en las poblaciones de ardillas.
6. Caza y captura: Las ardillas a veces son cazadas por su pelaje o como una forma de control de plagas, lo que puede contribuir a la disminución de la población.