¿Cómo podrían las cavidades nasales grandes y complejas conservar agua durante la exhalación?

La cavidad nasal está revestida por membranas mucosas ricas en vasos sanguíneos y senos paranasales, que ayudan a humidificar y calentar el aire que ingresa a los pulmones. Este proceso ayuda a prevenir la pérdida de agua por evaporación de los pulmones, especialmente en climas secos o durante esfuerzos intensos.

Las grandes y complejas cavidades nasales que se encuentran en algunos mamíferos, como los camellos, pueden ayudar a conservar aún más agua durante la exhalación al aumentar el área de contacto entre el aire y las membranas mucosas. Esto permite una humidificación más eficiente del aire inspirado y reduce la cantidad de vapor de agua que se pierde por evaporación durante la exhalación.

Además, la estructura tortuosa de la cavidad nasal en estos animales crea turbulencias en el flujo de aire, lo que ayuda a ralentizar el aire exhalado y promueve una mayor absorción de agua. Este mecanismo es particularmente importante en ambientes áridos donde la conservación del agua es crucial para la supervivencia.