Es poco probable que Mesosaurus, siendo una pequeña criatura de lagarto que solo podría sobrevivir en entornos poco profundos de agua dulce, pueda viajar a través de la vasta extensión del océano que separa África y América del Sur hoy.
He aquí por qué:
1. Distancia :La distancia entre África y América del Sur supera a las 4,500 millas (7,200 kilómetros). Mesosaurus tendría que cruzar todo el Océano Atlántico, que es uno de los cuerpos de agua más grandes de la Tierra, para viajar entre los dos continentes. Esta sería una empresa enorme para una criatura tan pequeña.
2. Preferencia del hábitat :Mesosaurus se adaptó a vivir en entornos de agua dulce poco profundos, como ríos, corrientes o lagos poco profundos. No tenía las adaptaciones necesarias para sobrevivir en el océano abierto, como la capacidad de nadar largas distancias o resistir las altas concentraciones de sal del agua de mar.
3. Evidencia geológica :La evidencia geológica no respalda la idea de que Mesosaurus cruza el Océano Atlántico. Se han encontrado fósiles de Mesosaurus en América del Sur y África, pero no se conocen registros fósiles de Mesosaurus en ninguna otra parte del mundo. Esto sugiere que Mesosaurus se limitaba a los hábitats de agua dulce de estos dos continentes.
4. Continental Drift :La teoría de la deriva continental, que propone que los continentes de la Tierra se hayan movido con el tiempo, puede ayudar a explicar la presencia de fósiles de Mesosaurus en África y América del Sur. Se cree que África y América del Sur alguna vez fueron parte de un supercontinente más grande llamado Gondwana. Mesosaurus podría haber habitado los entornos de agua dulce de Gondwana, y a medida que el supercontinente se separó, sus poblaciones se aislaron en los diferentes continentes.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que los mecanismos exactos por los cuales Mesosaurus llegó a distribuirse en África y América del Sur no son completamente conocidos y siguen siendo objeto de debate científico.