¿Por qué una población en disminución hace que las especies sean más vulnerables a la extinción?

Una población en disminución hace que una especie sea más vulnerable a la extinción por varias razones:

1. Diversidad genética reducida:a medida que disminuye el tamaño de la población, también disminuye el número de individuos con diferentes variaciones genéticas. Esta reducción de la diversidad genética puede limitar la capacidad de la especie para adaptarse a las condiciones ambientales cambiantes o resistir enfermedades y parásitos. Una población menos diversa tiene menos rasgos genéticos a los que recurrir en respuesta a los desafíos. Esto los hace más propensos a verse afectados negativamente por los cambios ambientales.

2. Aumento de la endogamia:las poblaciones más pequeñas son más propensas a la endogamia, donde se aparean individuos estrechamente relacionados. La endogamia puede aumentar la frecuencia de mutaciones genéticas dañinas y reducir la aptitud genética general, lo que lleva a individuos más débiles y menos adaptables. La endogamia puede resultar en una fertilidad reducida, una mayor susceptibilidad a las enfermedades y otros trastornos genéticos.

3. Mayor impacto de eventos fortuitos:las poblaciones pequeñas son más vulnerables al impacto de eventos fortuitos como desastres naturales, brotes de enfermedades o depredación. Estos eventos pueden tener un efecto devastador en una población pequeña, ya que la pérdida de incluso unos pocos individuos puede afectar significativamente la supervivencia de la especie. Las poblaciones pequeñas son más susceptibles a los efectos de eventos aleatorios, como desastres naturales o brotes de enfermedades. Debido a que hay menos individuos, la pérdida incluso de unos pocos puede tener un impacto significativo en toda la población.

4. Interacciones y roles ecológicos alterados:la disminución de las poblaciones puede alterar las comunidades ecológicas, ya que las especies interactúan entre sí de maneras complejas. La reducción o desaparición de una especie puede tener efectos en cascada sobre otras especies que dependen de ella para obtener alimento, refugio u otros recursos. Esta alteración de las interacciones ecológicas puede exacerbar aún más el declive de la especie y hacerla aún más vulnerable a la extinción.

5. Pérdida de potencial evolutivo:una población más pequeña tiene una capacidad reducida de adaptación y resiliencia evolutiva. Esto se debe a que hay menos individuos disponibles para producir descendencia con nuevas variaciones genéticas. Cuanto menor sea el tamaño de la población, menos combinaciones genéticas nuevas serán posibles. Esto limita la capacidad de la especie para evolucionar y adaptarse a nuevos desafíos en su entorno.

En general, un tamaño decreciente de la población aumenta el riesgo de extinción al reducir la diversidad genética, aumentar el impacto de eventos aleatorios, alterar las interacciones ecológicas y limitar la capacidad de las especies para adaptarse y evolucionar.