¿Cómo se descongela el salmón?

A continuación se muestran algunos métodos para descongelar salmón de forma segura y eficaz:

Descongelación del frigorífico: Este es el método más seguro y recomendado, ya que permite que el salmón se descongele lenta y uniformemente. Simplemente coloque el salmón congelado en el refrigerador y déjelo descongelar durante varias horas o toda la noche. Asegúrese de que el salmón esté bien empaquetado para evitar fugas.

Descongelación con agua fría: Este método es más rápido que descongelar en el refrigerador, pero requiere más atención. Coloque el salmón congelado en una bolsa de plástico a prueba de fugas, asegurándose de que la bolsa esté completamente sellada para evitar que entre agua. Sumerge la bolsa sellada en un recipiente con agua fría, asegurándote de que el agua se mantenga fría. Cambie el agua cada 30 minutos para garantizar una descongelación uniforme. Por lo general, se necesita aproximadamente una hora para que cada libra de salmón se descongele por completo.

Descongelación en microondas (con precaución): La descongelación en microondas puede ser rápida, pero es importante tener cuidado para evitar cocinar demasiado el salmón. Coloca el salmón congelado en un plato apto para microondas y cúbrelo con una toalla de papel húmeda. Cocine el salmón en el microondas en la configuración de descongelación durante intervalos cortos (comience con 30 segundos a 1 minuto), volteando el salmón después de cada intervalo. Después de cada intervalo, verifique la consistencia y la temperatura para evitar que se cocine demasiado. Utilice este método sólo si planea cocinar el salmón inmediatamente.

Evite el uso de agua caliente, ya que puede provocar una cocción desigual y crecimiento bacteriano.

Después de descongelar el salmón, cocínelo bien hasta una temperatura interna de 145 grados Fahrenheit (63 grados Celsius), medida con un termómetro para alimentos. Esto garantiza que el salmón sea seguro para consumir.