¿Qué debes hacer si tu perro comienza a malhuminarse?

Los perros en realidad no se enfurecen de la misma manera que los humanos, ya que carecen de la compleja capacidad emocional para ello. Sin embargo, pueden mostrar comportamientos que * aparecen * malhumorado, como:

* Las orejas y la cola bajadas: Esto indica una falta de confianza o una sensación de estar "abajo".

* Evitar el contacto visual: Esto podría ser una señal de sentirse retirado o sin interés.

* Quejándose o suspirando: Estos sonidos pueden expresar infelicidad o frustración.

* Pérdida del apetito: Esto podría indicar estrés o tristeza.

* Actividad reducida: Pueden ser menos juguetones o enérgicos.

Qué hacer si tu perro aparece "malhumorado":

1. Identifique la causa: Considere lo que podría estar causando el comportamiento. ¿Algo cambió recientemente, como una nueva rutina, una nueva mascota o un cambio en su horario? ¿Hubo una interacción reciente que podría haberlos molestado?

2. Proporcione comodidad: Ofrezca caricias suaves, palabras relajantes y un espacio seguro para que su perro se relaje.

3. Déles atención: Pase tiempo de calidad con su perro, participando en sus actividades favoritas, como jugar a buscar o caminar.

4. Evite regar el regañón o el castigo: Castigarlos por aparecer "malhumorado" solo empeorará la situación.

5. Consulte a su veterinario: Si el comportamiento es persistente o extremo, consulte a un veterinario para descartar cualquier condición médica subyacente.

Notas importantes:

* No cedas a un comportamiento exigente: Si su perro está actuando, es crucial no ceder ante sus demandas. Esto solo reforzará el comportamiento negativo.

* sea paciente y consistente: Se necesita tiempo para comprender y abordar las necesidades de su perro. Sea paciente y consistente en su enfoque para ayudarlos a sentirse seguros y amados.

Recuerde, los perros se comunican de manera diferente a los humanos. Mientras que "malhumorado" podría ser una emoción humana, es probable que su perro exprese alguna forma de angustia o incomodidad. Comprender la causa subyacente y proporcionar el tipo de apoyo adecuado puede ayudar a que su amigo peludo se sienta feliz y seguro nuevamente.