¿Qué pasa si el niño come comida para perros?

Los riesgos potenciales de que un niño coma comida para perros incluyen:

- Alteraciones digestivas: La comida para perros no está formulada para el consumo humano y puede provocar problemas digestivos, como vómitos, diarrea y dolor abdominal.

- Carencias nutricionales: Es posible que la comida para perros no proporcione todos los nutrientes que un niño necesita para un crecimiento y desarrollo adecuados. Esto puede provocar deficiencias nutricionales, que pueden causar una variedad de problemas de salud.

- Alergias o sensibilidades: Algunos niños pueden ser alérgicos o sensibles a los ingredientes de la comida para perros, lo que puede causar una variedad de síntomas, como erupciones cutáneas, urticaria, hinchazón y dificultad para respirar.

- Preocupaciones sobre la seguridad alimentaria: La comida para perros no está sujeta a las mismas normas de seguridad alimentaria que la comida para humanos y, por lo tanto, puede estar contaminada con bacterias, virus u otras sustancias nocivas. Estos pueden causar intoxicación alimentaria u otras enfermedades.

Los signos y síntomas de que un niño puede haber comido comida para perros incluyen:

- Vómitos

- Diarrea

- dolor abdominal

- erupciones

- urticaria

- Hinchazón

- Dificultad para respirar

Si sospecha que su hijo ha comido comida para perros, es importante llamar a la Línea Nacional de Ayuda sobre Envenenamientos al 1-800-222-1222. Tenga en cuenta que la Línea Nacional de Ayuda sobre Envenenamientos solo proporciona información y no sustituye la atención médica. Si le preocupa la salud de su hijo, busque atención médica de inmediato.