Síntomas de Hemorroides en Gatos

Las hemorroides son una condición médica asociada a hinchazón o inflamación de las venas o vasos sanguíneos de los tejidos blandos alrededor de la parte inferior del recto o del ano . Las hemorroides no son exclusivos de los gatos. Los seres humanos, los perros y los caballos también pueden tener hemorroides . Las causas de las hemorroides felinos incluyen esfuerzo para mover las heces , estreñimiento crónico o la diarrea . Si su gato muestra síntomas de las hemorroides , llevarla a un veterinario tan pronto como sea posible para el diagnóstico y tratamiento. Las hemorroides externas

Los síntomas visibles de las hemorroides externas felinos incluyen picazón , sensibilidad y dolor en el área rectal. Su gato puede tratar de aliviar el malestar arrastrando su trasero en el suelo, persiguiendo su cola o excesivamente lamiendo el área rectal . También puede observar un colgante protuberancia de color marrón rojizo o violáceo en el ano de su gato , lo que es una hemorroide . Si la condición no se trata, la hemorroide puede crecer rojo más grande y más brillante en apariencia.

Hemorroides internas

Gatos con las hemorroides internas pueden no mostrar ninguna molestia porque las hemorroides están dentro del ano y no tienen ningún nervios sensibles al dolor . El sangrado es a menudo el primer síntoma de las hemorroides internas felinos , lo que resulta en la sangre en las heces del gato. Sangre en las heces fecales, sin embargo, también puede ser el resultado de tumores rectales y fisuras. Si usted sospecha que su gato tiene hemorroides, llevarla a un veterinario para un diagnóstico y tratamiento.

Infección

hemorroides felinos no son potencialmente mortales . Si no se trata , sin embargo , las hemorroides pueden conducir a otras condiciones médicas dolorosas, como abscesos en las glándulas anales. Los abscesos que no reciben tratamiento pueden dañar las terminaciones nerviosas en el ano y pueden llevar a la incontinencia fecal. La incontinencia fecal es una condición médica en la que los gatos no son capaces de mantener o controlar su materia fecal.