¿Cómo pueden ver los búhos en la oscuridad?

Los búhos tienen una visión nocturna excepcional debido a una combinación de características anatómicas únicas y adaptaciones fisiológicas. Aquí hay algunos factores clave que permiten a los búhos ver tan bien en la oscuridad:

Ojos grandes: Los búhos tienen ojos desproporcionadamente grandes en comparación con el tamaño de su cabeza. Estos ojos grandes les permiten capturar más luz, lo cual es crucial para ver en condiciones de poca luz.

Estructura de retina: La retina, que recubre la parte posterior del ojo, contiene células fotorreceptoras especializadas responsables de detectar la luz. Los búhos tienen una alta densidad de varillas en sus retinas, que son particularmente sensibles a los bajos niveles de luz. Además, los búhos tienen un área especializada llamada fóvea, que contiene células de cono responsables de una visión detallada. La combinación de barras y conos permite a los búhos ver tanto en entornos bien iluminados como con poca luz.

Tapetum lucidum: Detrás de la retina, los búhos tienen una capa reflectante llamada Tapetum Lucidum. Esta capa actúa como un espejo, reflejando la luz que pasa a través de la retina nuevamente al ojo. El Tapetum Lucidum mejora la luz disponible y aumenta la sensibilidad del búho a la luz débil.

Ojos en forma de tubo: A diferencia de los humanos, que tienen ojos esféricos, los búhos tienen ojos en forma de tubo. Esta forma cilíndrica reduce la cantidad de luz que se dispersa dentro del ojo, lo que resulta en imágenes más nítidas.

Sensibilidad de baja luz: Los búhos tienen una mayor concentración de un pigmento llamado rodopsina en sus retinas. La rodopsina es una molécula sensible a la luz que ayuda a detectar bajos niveles de luz.

Flexibilidad de cabeza y cuello: Los búhos poseen cuellos altamente flexibles y pueden rotar sus cabezas hasta 270 grados en cualquier dirección. Este rango de movimiento excepcional les permite centrarse en objetos sin mover físicamente todo su cuerpo, minimizando cualquier perturbación que pueda alertar a su presa.

Visión binocular: Mientras los ojos de un humano se colocan en la parte delantera de la cara, los ojos del búho se mueven hacia adelante, otorgándoles una visión binocular. Esto significa que ambos ojos pueden centrarse en el mismo punto, proporcionando una percepción de profundidad estereoscópica para mejorar el juicio de distancia y la captura precisa de la presa.

Estas adaptaciones trabajan juntas para dar a los búhos una visión nocturna increíble y ayudarlos a navegar y cazar de manera efectiva en condiciones de poca luz.