¿Los animales y los humanos tienen el mismo tipo de vista?

Si bien los humanos comparten algunas similitudes en la vista con otros animales, existen diferencias significativas entre los sistemas visuales de diferentes especies. Las principales diferencias incluyen:

Visión de color: Los humanos son tricromáticos, lo que significa que pueden percibir tres colores primarios (rojo, verde y azul). Este rasgo nos permite distinguir una amplia gama de colores. En comparación, muchos mamíferos, como perros, gatos y vacas, son dicromatos, lo que significa que solo tienen dos tipos de células fotorreceptoras de cono en sus retinas. Como resultado, son menos capaces de distinguir entre ciertos colores, como el rojo y el verde. Sin embargo, algunos otros animales, como los primates y algunas aves, tienen una visión tricromática o incluso tetracromática (cuatro colores), lo que les permite percibir los colores de formas que los humanos no pueden.

Resolución y agudeza: Los humanos tienen una agudeza visual relativamente alta, lo que significa que podemos ver los detalles finos claramente. Esto es facilitado por la alta densidad de las células fotorreceptoras de cono en la parte central de nuestras retinas, llamada mácula. Algunas aves de presa, como las águilas, tienen una agudeza visual aún mayor, lo que les permite detectar pequeñas presas a grandes distancias. Otros animales, como los gatos, tienen menor agudeza, pero se destacan en condiciones de poca luz debido a una mayor proporción de células fotorreceptoras de varilla, que son más sensibles a la luz tenue.

Visión periférica: Los humanos tienen un amplio campo de visión, lo que nos permite ver un área grande sin mover los ojos. Sin embargo, algunos animales, como conejos y caballos, tienen campos de visión aún más amplios, dándoles una mejor idea de su entorno.

Visión nocturna: Los humanos tienen una visión nocturna limitada en comparación con muchos animales. Esto se debe a que los humanos tienen un número relativamente pequeño de células fotorreceptoras de varillas en comparación con otras especies. Los animales como los gatos, los búhos y los mapaches tienen una mayor proporción de barras, lo que les permite ver mejor en condiciones de poca luz. Algunos animales, como geckos y serpientes, incluso tienen estructuras especializadas en sus ojos que mejoran aún más la visión nocturna.

Detección de movimiento: Muchos animales tienen adaptaciones visuales especializadas para detectar el movimiento. Por ejemplo, ciertos lagartos e insectos tienen neuronas especializadas que responden específicamente al movimiento. Estas adaptaciones ayudan a estos animales a localizar presas o evitar depredadores.

Vale la pena señalar que incluso dentro de la misma especie, puede haber variaciones en la vista basadas en factores como la genética y las adaptaciones individuales.