La leche de vaca no es venenosa para los elefantes, pero puede causar problemas digestivos porque los elefantes no están adaptados para digerir la lactosa, el azúcar que se encuentra en la leche. La intolerancia a la lactosa puede provocar hinchazón, diarrea y dolor abdominal. Además, la leche de vaca no aporta a los elefantes los nutrientes que necesitan, como la vitamina C y el hierro. Por lo tanto, no se recomienda alimentar a los elefantes con leche de vaca.