ladrar al perro excesivo es molesto para muchos propietarios de perros - y sus vecinos. Mientras que usted no puede dejar totalmente su perro ladre , existen varias técnicas de entrenamiento que usted puede utilizar para detener el ladrido excesivo de su perro. Entienda su perro

Una de las mejores maneras de conseguir su perro deje de ladrar es entender por qué él está ladrando en el primer lugar . Tome nota de las veces que está ladrando . ¿Es él está ladrando para la atención, de la emoción, por miedo o por causa de la ansiedad por separación ? Si usted no sabe por qué su perro ladra , nunca llegaremos a ninguna parte - especialmente si su perro está tratando de llamar su atención
refuerzan No Barking

Reforzar con su perro que no ladrar es un comportamiento deseado . Si su perro está ladrando enseñarte algo , o para advertirle sobre un posible intruso , reconoce que no sabe lo que está haciendo , entonces ordena que se detuviera. Una vez que ha dejado de ladrar, reforzar su comportamiento con golosinas y atención. Dicho esto, la enseñanza de su perro a no seguir sus instintos de protección es casi imposible.
Enseñar a un No- Bark Comando

Muchas personas enseñan a sus perros a ladrar el comando - "hablar ". El mismo truco se puede utilizar a la inversa . Muchos perros se les puede enseñar un comando do-not - corteza. Primero enseñar a su perro a ir en algún lugar de la casa en orden , como una esquina, una cama o un cajón , utilizando el refuerzo positivo. Una vez que le has enseñado a hacer eso, usted puede utilizar este comando para conseguir que deje de ladrar. Cuando ladra , interrumpirlo y decir " ir a la caja. " Este comando le distraiga de sus ladridos y , en la mayoría de los casos, conseguir que se detuviera.
Ignorar ladridos excesivos

Muestre su perro que no ladrar es el comportamiento deseado en la mayoría de las situaciones. Si su perro está ladrando para la atención, totalmente ignorarlo. No hacer contacto visual. O simplemente dar la espalda a él hasta que se detenga. Una vez que su perro ha dejado de ladrar, reforzar su silencio con golosinas y elogios .